¿Te interesan las formas creativas de aprender idiomas extranjeros? Si es así, te gustará una de las técnicas mnemotécnicas, llamada el pálacio mental. Descubre cómo usarlo y combinar sus posibilidades con nuestros cursos.
Introducción
Al aprender idiomas, a veces nos preguntamos qué hacer para facilitar aún más la memorización, especialmente si estamos dando los primeros pasos en un idioma en particular. El método SuperMemo se basa en repeticiones planificadas por un algoritmo especial, que sugiere el momento y el material a repetir, en función, entre otros, de tu progreso en el curso. Puedes facilitar aún más la memorización, por ejemplo, involucrando varios sentidos en el proceso de aprendizaje. Hoy, te presentaremos uno de los métodos que facilitan la memorización y te mostraremos cómo usarlo junto con la aplicación SuperMemo.
¿Qué es la técnica mnemotécnica?
El término «mnemónico» proviene del idioma griego, en el cual mneme significa «memoria». Entonces, el nombre en sí sugiere que estaremos tratando con formas de memorizar información y recordarla cuando sea necesario.
Gracias a diversas técnicas mnemotécnicas, la memorización debería ser más fácil y rápida que con otros métodos. Estas técnicas a menudo se basan en rimas, asociaciones y elementos humorísticos, todo para que la información permanezca en la memoria el mayor tiempo posible.
Curiosamente, las raíces de las técnicas mnemotécnicas se remontan al siglo VI a.C. Creadores y filósofos antiguos de renombre, como Simonides, Cicerón y Aristóteles, dedicaron atención a los problemas de la memoria y la memorización.
Pálacio mental – conceptos básicos de mnemotecnia
Entonces, ¿qué es el pálacio mental, también conocido como método de los loci o método del palacio de la memoria? Es una elaborada técnica mnemotécnica que aprovecha nuestra memoria espacial. Esto significa que la clave de este método es la visualización de un espacio específico con tantos detalles y ubicaciones más pequeñas como sea posible, tales como: una casa familiar, una calle con tiendas, un palacio real y otros.
Después de imaginar un espacio dado, podemos dividir la información de un tema más grande en partes más pequeñas, que asignamos en nuestra memoria a una ubicación específica, por ejemplo, la mesita de noche junto a la cama en el dormitorio o la mesa ubicada en el comedor. Luego, cuando necesitemos recordar información específica, imaginaremos nuestro pálacio mental y encontraremos el lugar donde la «almacenamos». Incluso podemos imaginar el camino exacto que debe tomarse para llegar al punto que elegimos con la información colocada allí.
Para mejorar nuestra capacidad de memoria, podemos utilizar propiedades adicionales de nuestra memoria, más allá de la memorización espacial, como conectar información con sonido, color o aroma.
El pálacio mental no solo permite una buena memorización de la información, sino también el orden en el que dicha información debe ser recordada, lo cual es particularmente útil, por ejemplo, al preparar un discurso que queremos ofrecer de memoria. Al establecer caminos específicos de una pieza de información a otra en nuestro pálacio, nos será mucho más fácil recordar la secuencia de argumentos que pretendemos presentar en el discurso.
Inicialmente, será más fácil usar la imaginación de un lugar que conocemos muy bien, visitarlo todos los días y conocer todos sus rincones y recovecos. Sin embargo, con el tiempo, a medida que ganamos experiencia en este método y necesitamos espacios adicionales, por ejemplo, para otros segmentos de conocimiento, podemos intentar imaginar lugares ficticios.
Método del pálacio mental en la cultura
El pálacio mental, debido a su interesante y elaborada forma, aparece a menudo en varios textos culturales. Aquí hay algunos ejemplos:
- Serie de televisión Sherlock (2010) – En esta producción, el personaje principal, Sherlock Holmes, utiliza con frecuencia el método del pálacio mental, gracias al cual recuerda memorias y hechos necesarios para resolver rompecabezas detectivescos. Su mente funciona significativamente más rápido que el resto de la sociedad en el día a día, y entrar al palacio le permite detenerse por un momento y conectar hechos ocultos en varias ubicaciones de la memoria.
- Serie de televisión El Mentalista (2008) – En esta serie, además del pálacio mental, aparecen muchas otras técnicas mnemotécnicas, utilizadas por el protagonista, Patrick Jane, quien colabora con la policía en casos criminales.
- Libros Hannibal (1999) y Hannibal Rising (2006) – En las novelas de Thomas Harris, uno de los asesinos en serie más reconocibles, Hannibal Lecter, ocupa un lugar central. En ambas obras, el escritor nos proporcionó una descripción detallada del pálacio mental utilizado por Lecter. Su espacio se basa en las reglas proporcionadas por los antiguos, Simonides y Cicerón. El propio palacio de Hannibal tiene una forma similar a un museo con largos corredores y suelos de mármol.
- Videojuego Twin Mirror (2020) – Sam Higgs, el personaje principal al que controlamos en el juego, utiliza el pálacio mental para volver a los recuerdos de hace muchos años. Gracias a esto, recopila pistas que pueden ayudarlo a resolver el misterio de la muerte de su amigo.
Pálacio mental y aprendizaje de idiomas con SuperMemo
La técnica del pálacio mental puede ser un gran apoyo para aprender idiomas extranjeros, especialmente en las etapas iniciales de aprender un nuevo idioma cuando aún no tenemos una red de asociaciones con sus palabras. Gracias a este método, podemos agrupar el vocabulario en conjuntos temáticos más pequeños y construir fácilmente asociaciones que nos ayudarán a recordar nueva información durante más tiempo.
¿Cómo combinar el uso del pálacio mental con los cursos de SuperMemo?
Puede haber muchas formas, así como hay muchas opciones para crear un pálacio mental. Sin embargo, si estás comenzando a aprender un nuevo idioma extranjero desde cero, puedes aprovechar los consejos presentados por Tim Doner en su charla TEDx: https://www.youtube.com/watch?v=xNmf-G81Irs&ab_channel=TEDxTalks. Él discute ejemplos de cómo utilizó el pálacio mental y otras técnicas mnemotécnicas para aprender idiomas. ¡Gracias a estos métodos, el hombre ha aprendido a hablar en más de veinte idiomas!
Una buena solución adicional también puede ser colocar palabras más difíciles aprendidas en un día determinado en tu pálacio mental, de modo que, después de un tiempo, durante las repeticiones, puedas recordarlas más fácilmente a través de asociaciones con ubicaciones específicas en nuestro espacio imaginado.
Muchas personas encuentran difícil aprender modismos, principalmente porque no pueden traducirse literalmente. En nuestro pálacio mental, podemos colocar escenas enteras que representen modismos, lo que nos facilitará recordarlos. ¡Recuerda! Cuanto más extrañas y humorísticas sean tus asociaciones, es más probable que recuerdes la información durante más tiempo.